Viajar te vuelve minimalista
¿Qué es ser minimalista? Según la definición de Wikipedia
“(…) Es la tendencia a reducir a lo esencial, a despojar de elementos sobrantes. La frase que resume la filosofía minimalista es la famosa «menos es más». Atribuida al arquitecto moderno Mies Van der Rohe”
Yo antes vivía en mucho exceso. Consumía y compraba cosas todo el tiempo. Esto afectaba mi bolsillo y al planeta. Pero también me afectaba al viajar.
Empacaba de más cuando me iba de vacaciones. Siempre compraba cosas innecesarias. Terminé cambiando mi mentalidad luego de trabajar viajando y viajando para trabajar. Encontré el balance y descubrí que era necesario y que no.
Aquí te dejo como me modificó el minimalismo y como lograrlo si te interesa.
Empacar inteligentemente
“Pack smart” ese fue uno de los consejos que se me dieron antes de comenzar a trabajar en cruceros. Al principio no lo entendía, hasta que llegue al barco y todo me cerró.
La idea de empacar inteligentemente es que todo cumpla con más de un propósito.
Por ejemplo: al empacar un abrigo yo empaco un tapado especial de viaje. Es impermeable, abrigado, combina con cualquier atuendo. Tiene su propia bolsa y entra en mi mochila.
Empacar por usos
Me considero una persona muy interesada en la moda. Por eso cuando empaco mi ropa no lo hago por prenda sino por atuendo.
Intento pensar en vestimentas que combinen entre sí y que pueda reutilizar.
Ser minimalista no significa vestirse mal o cambiar toda nuestra vida.
Por ejemplo: empacar una camiseta blanca lisa. Esa remera combina con faldas, jeans y debajo de vestidos.
Elegir una prioridad
No todas las cosas pueden ser optimizadas. Pero al momento de empacar elegir una sola que pueda ocupar mucho espacio.
Tener en cuenta ese objeto u objetos indispensables para nuestro viaje al momento de empacar. Esto nos ayuda a tener en cuenta que otras cosas vamos a tener que dejar en casa.
Por ejemplo: si sos una fotógrafa como yo, sabes que los equipos fotográficos ocupan mucho espacio. Mi prioridad es llevar todos mis lentes favoritos, baterías y cámaras.
No comprar recuerdos inútiles
Una de las costumbres que me cambiaron es el comprar un montón de imanes y adornos al viajar.
Ocupan espacio y no cumplen ningún propósito para mí.
Los mejores recuerdos son los que se pueden usar y agregan valor a la vida del otro.
Por ejemplo: yo regalo comida típica, prendas de vestir o accesorios. No compro regalos para todos y no en todos los viajes.
Organización
Lo mejor que me brindó esta experiencia. El minimalismo me permitió tener organización.
Al tener menos cosas, es más fácil saber si uno se olvida o pierde algo.
Todo tiene un lugar. Todo “entra” en la valija. No se es víctima de sobre equipaje.
Te permite también viajar solo con un carrry on o una sola valija pequeña.
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1 año
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